¿Quieres lucir un bronceado radiante todo el año? El bronceador es la manera perfecta de lograrlo: aporta calidez a tu tez y define la estructura facial incluso en los fríos y nublados meses de invierno.
Aplicar el bronceador correctamente puede hacer maravillas para realzar tu apariencia natural. Sin embargo, también puede ser un producto intimidante y es fácil excederse con la aplicación.
Para ayudarte a conseguir el look dorado de tus sueños, hemos creado una guía completa para la aplicación del bronceador. Te explicaremos cómo elegir los productos adecuados, cómo elegir la ubicación del bronceador y cómo aplicarlo como un profesional.
Encontrar el bronceador adecuado es el primer paso para perfeccionar tu look. Los bronceadores vienen en diferentes presentaciones, incluyendo fórmulas líquidas, en crema y en polvo. La elección se basa principalmente en tus preferencias y el look que buscas: las fórmulas líquidas o en crema suelen tener un acabado más húmedo, mientras que las fórmulas en polvo pueden ser mate o brillantes.
¡Solo asegúrate de elegir un producto de alta calidad! Busca productos de maquillaje veganos, sin parabenos, sin alcohol, sin talco y sin crueldad animal, como nuestros bronceadores en SHEGLAM.
¿No estás seguro de por dónde empezar? Nuestro Bronceador Líquido Brillante Sun Beam es una excelente opción. Esta fórmula brillante, altamente pigmentada y de larga duración está disponible en seis tonos.
También puedes usar el bronceador según tu tipo de piel: seca, grasa, mixta, sensible o normal. Tu tipo de piel suele estar determinado por las hormonas y la genética, pero también puede verse influenciado por tu estilo de vida.
Los productos en polvo suelen ofrecer un acabado mate, lo cual puede ser útil si buscas reducir el exceso de brillo o grasa. Por otro lado, si tu piel es más seca y opaca, una fórmula líquida o en crema puede ayudarte a conseguir una piel más luminosa.
No hay tono, pero elegir el tono incorrecto de bronceador puede hacer que tu maquillaje no luzca como lo imaginabas. La regla general es seleccionar un producto que sea uno o dos tonos más oscuro que tu tono de piel natural; esto te dará un toque de color sutil y natural.
Es importante asegurarte de que el tono que elijas complemente tu tez natural. Una de las mejores maneras de asegurarte es probar el tono a lo largo de la mandíbula y luego comprobar cómo se ve con luz natural.
Si buscas un look de maquillaje más dramático y editorial, elige un bronceador dos o tres tonos más oscuro que tu tono de piel natural. Este método lo suelen usar artistas y celebridades en las alfombras rojas para asegurarse de que sus rasgos no se vean apagados bajo las luces brillantes. Si vas a un evento especial, ¡un bronceador más oscuro puede serte útil para todas esas fotos!
Una vez que hayas elegido un bronceador, el siguiente paso es elegir la mejor herramienta de aplicación, según el producto que uses.
Para los bronceadores en polvo, una brocha funciona perfectamente. Lo ideal es optar por usar un pincel suave y angular, como el que se encuentra en nuestro Kit de pinceles Pro Core , para garantizar una aplicación precisa y un acabado suave y difuminado.
Si usas un bronceador líquido o en crema, una esponja densa suele funcionar mejor. Humedece un poco la esponja primero para que el producto se funda en tu piel y permita una cobertura más modulable.
Decidir dónde colocar el bronceador es la clave para un look uniforme. El objetivo es realzar la forma natural de tu rostro y añadir calidez sin opacar todo tu glamour.
Si quieres que tu maquillaje se vea más angular y definido, usa el bronceador donde normalmente colocarías el contorno. Aplica el bronceador a lo largo de la mandíbula y resalta los huecos de las mejillas. Agrega un poco de bronceador a los lados de la nariz para que se vea recta y definida.
Si buscas un look más sutil y limpio, también puedes usar el bronceador para parecer playero y bronceado. Crea la ilusión de estar ligeramente bronceado aplicando el bronceador en todas las zonas donde la luz del sol suele llegar a tu piel, como a lo largo de la frente, la punta de la nariz y las mejillas.
Si quieres que tu bronceador te haga brillar, prueba a optar por un bronceador brillante en lugar de uno mate. Aunque puedes usar un cosmético en polvo y espolvorearlo ligeramente sobre tu piel, una forma sencilla de lograr una estética bronceadora con efecto húmedo es agregar nuestras Glo Hero Bronzing Drops o Sunburst Glow Mixer sobre tu base de maquillaje para un brillo total.
Un problema común con el bronceador es aplicar demasiado, ¡un error fácil de cometer con un producto tan divertido! Quieres que el bronceador sea visible sin que se vea demasiado oscuro o turbio. El producto debe realzar, no distraer... y esto puede requerir un poco de práctica.
Una manera fácil de asegurarte de que el bronceador quede justo como quieres es aplicarlo gradualmente. Aplica un poco de bronceador en la brocha y aplica gradualmente. Si aún se ve demasiado claro, ¡simplemente agrega un poco más!
¿No sabes cuándo es suficiente? Piensa en tus planes para el día y decide si tu bronceador combina con el estilo. Por ejemplo, si sabes que vas a estar al aire libre, mírate con luz natural. Si vas a salir con amigos y sabes que te tomarán fotos, tómate una selfie rápida y mira cómo se ve tu maquillaje en la cámara.
Después de aplicar el bronceador en el rostro, es posible que queden algunas líneas marcadas. Usa tu brocha o esponja de maquillaje para difuminar los bordes y lograr un acabado suave. Una brocha difuminadora ayuda a difuminar los diferentes colores de tu maquillaje y puede darle a tu bronceador un aspecto más natural.
Una vez que estés satisfecha con tu look de maquillaje, fíjalo con polvos fijadores translúcidos o tu spray fijador favorito. Los polvos translúcidos son incoloros y están diseñados para fijar los productos. Si tienes la piel grasa, los polvos fijadores también pueden ayudar a absorber el exceso de sebo y minimizar el brillo no deseado. Los polvos fijadores también son útiles si necesitas atenuar un poco el bronceador. Incluso después de difuminarlo, tu bronceador podría verse un poco pesado si te excediste un poco (lo cual entendemos perfectamente). Aplicar polvos translúcidos sobre el bronceador puede suavizar la intensidad y hacer que se vea más uniforme.
Si tienes la piel seca, los productos en polvo a veces pueden acentuar las líneas de expresión o crear una apariencia pastosa. Si notas esto, intenta usar polvos translúcidos solo en las zonas del rostro donde aplicaste bronceador, o prueba con un spray fijador.
Ahora que eres una experta en bronceadores, ¡es hora de ponerse manos a la obra! Invierte en cosméticos premium y de confianza y prueba estos nuevos consejos y trucos. No olvides ser precisa al aplicarlos. Con un poco de práctica, estamos seguros de que lucirás bronceada y hermosa en un abrir y cerrar de ojos.
No olvides etiquetarnos en Instagram @sheglam_official. ¡Estamos deseando ver tu próxima obra maestra de maquillaje resplandeciente!